Según los datos de la tercera oleada del año del Randstad Workmonitor seis de cada diez españoles consideran que su formación es mayor de la que necesitan para el desarrollo de sus trabajos. Solo es superado por Grecia con un 69%. Este estudio sobre las expectativas laborales muestra una realidad palpable en el mercado laboral español. Muchos estudiantes completan una formación muy específica orientada a unos trabajos que a la postre no terminan desarrollando.
La situación del empleo en España no favorece, en general, a las personas con una alta cualificación. El tejido laboral de nuestro país ha cambiado en los últimos años ofreciendo menos posibilidades a los trabajadores o a los estudiantes que buscan su primer empleo. El cierre de empresas y la alta tasa de paro obligan a la búsqueda de alternativas.
Por un lado, muchos trabajadores optan por emigrar a otros países, especialmente dentro de la Unión Europea, intentando encontrar ofertas de trabajo acordes a su formación. Si se quedan en España, la opción más realista para un gran número de trabajadores es encontrar un empleo que exija un nivel de formación menor.
Así las cosas, podría señalarse también que existe una falta de planificación o adaptación a la realidad del mercado laboral español. En determinados sectores la capacidad para absorber nuevos trabajadores cualificados no es muy alta. Un estudiante considera que habiendo dedicado varios años a perfeccionar sus competencias laborales, incluyendo en muchos casos desarrollo de máster o idiomas, tendrá asegurado el trabajo. Pero a la postre, la realidad es distinta. De esta forma, es conveniente que realizar un estudio previo de las opciones que existen en un determinado sector para evitar sorpresas.
En comparación con otros países, los datos del Randstad Wormonitor revelan una gran diferencia entre los propios estados de la Unión Europea. En Dinamarca solo uno de cada cuatro trabajadores cree que su formación y experiencia está por encima de sus obligaciones laborales. Le sigue Holanda con un 32% y Alemania con un 42%. Datos lógicos si se tienen en cuenta la situación económica en la que se hallan estos países.