Parecía uno de los ámbitos intocables para el Gobierno actual, pero las prestaciones por desempleo también sufren recortes. Las reformas iniciadas desde que el Partido Popular ganó las elecciones siguen la línea de reducir al máximo el gasto público. El objetivo es cumplir con las exigencias de déficit que vienen desde la Unión Europea.
Tal vez no era la intención del Gobierno pero la situación dramática que sigue viviendo la economía fuerza a realizar nuevos recortes, al menos así es como se presenta el nuevo paquete de medidas desde fuentes gubernamentales. Y lo que nadie esperaba se ha producido. El colectivo de desempleados que más sufre los efectos de la crisis también verá reducidos sus ingresos al cobrar el paro.
Los nuevos parados que se incorporen a la prestación recibirán a partir del sexto mes un 50% de la base reguladora frente al 60% que había hasta ahora. Es una reducción del 10% que, según el Gobierno, tiene como fin animar a la búsqueda de empleo. Lógicamente, esta afirmación no ha tenido muy buena acogida entre los parados que dedican muchas horas a buscar trabajo sin éxito. Afortunadamente se van tomando medidas para que las personas en búsqueda activa de empleo tengan cada vez más posibilidades de encontrar un trabajo atendiendo a aspectos como la formación, las herramientas de empleo del gobierno como la posibilidad de renovar el paro desde casa son pequeños actos que ayudan.
Un desempleado con derecho a prestación, es decir si había trabajado de manera continuada durante un periodo de tiempo, cobraba hasta ahora un 70% de su base reguladora (que equivale al último salario). A partir del sexto mes pasa a cobrar el 60%. La diferencia es que los trabajadores que pierdan su trabajo a partir de ahora cobrarán el 50% a partir del sexto mes. Por lo tanto, esta medida no afecta a los parados que ya estén recibiendo la prestación en la actualidad.
Por otro lado, la duración máxima de esta prestación se mantiene en un máximo de 24 meses. Para cobrar el paro durante dos años, se ha debido trabajar a tiempo completo seis años o más.
De esta manera el recorte para los desempleados no es muy cuantioso pero si establece un peligroso precedente. Y es que es la primera vez en la historia de la democracia que baja la prestación por desempleo.